La comida de los niños se pudre en una casa de Cereté: denuncian graves irregularidades en millonario contrato del ICBF

El contrato por más de 2 mil 600 millones de pesos relacionado así: 23002482025 ICBF Suministro Alimentos, ICBF CO1.SLCNTR.14678370 con la Confederación Baluarte Campesino Colombia, habría nacido espurio desde el mismo momento en que se eligieron tanto el planificador logístico del contrato Francisco Rodríguez, como la escogencia de la directora ejecutiva encargada del proyecto alimenticio, Claudia Jiménez, hoy precandidata a la cámara de representante por Córdoba por el Pacto Histórico.

En la Contraloría, Fiscalía y Procuraduría se denunció que estas dos personas fueron elegidas dentro de una asamblea que no cumplió con los requisitos exigidos a las federaciones campesinas de Colombia que se asocian y pueden contratar con el estado.

Los dos representantes antes mencionados hacen parte de la Federación Baluarte Campesino que la conforman 286 asociaciones campesinas del departamento de Córdoba de las sub regiones alto, bajo y medio sinú.

Pero todo parece indicar y las evidencias así lo demuestran, que luego de que se hicieron al contrato para manejar raciones por preparar y suministro de meriendas no contaban con una bodega de acopio en el municipio de Cereté para darle el manejo adecuado a alimentos perecederos.

Al no tener una bodega de acopio todos los alimentos lo almacenaron en la casa del planificador logístico, es decir de Francisco Rodríguez en Cereté causando daños en muchos de los productos y así los entregaban a los beneficiarios de los programas alimentarios del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en los municipios de Planeta Rica, Cereté y San Pelayo.

Hay evidencias que frutas y otros productos como verduras que debían estar en refrigeración y permanecían en los pisos de habitaciones de la casa de Francisco Rodríguez.

La naturaleza de este tipo de contratos precisa que por lo menos el 30% de los productos que se compren para raciones por preparar deben ser adquiridos a las asociaciones campesinas de los municipios donde se desarrolla el proyecto, pero en este caso no se hacía sino por el contrario, los van a comprar al municipio de Buenavista a un negocio conocido como Autoservicios la Granjita y otros en la firma Bioservicios Empresariales en Montería.

De este último negocio aseguran quienes denuncian la presunta irregularidad, que sería manejado por la directora ejecutiva del mismo contrato, es decir Claudia Jiménez.

El contrato tiene una vigencia que va entre marzo y el mes de septiembre del año 2025 y es tal la premura de poderlo desarrollar sin que se vean afectados los intereses económicos de quienes lo manejan, que ya están aspirando a un nuevo contrato porque a juicio de los denunciantes lo que se busca es amasar suficiente capital para la plataforma política de Claudia Jiménez, quien aparece ya como precandidata a la cámara de representantes por Córdoba del Pacto Histórico y quién anda en campaña sosteniendo reuniones en los municipios con asociaciones afines a la Federación Baluarte Campesino.

También se denuncia que para justificar los gastos operacionales de este millonario contrato debieron hacer nombrar a varias personas que aparecen en nómina pero que realmente no ejecutan ninguna labor, es decir corbatas invisibles.

En el caso de Claudia Jiménez la gravedad radica en que ella como directora ejecutiva del contrato tiene un sueldo millonario y además de eso se dice que estaría detrás de las empresas que suministran insumos a la misma Confederación Baluarte Campesino que ella en estos momentos está representando en Córdoba a través de ese contrato con el Bienestar Familiar.

Ante todas estas presuntas irregularidades se convocó a una cita a una reunión con el presidente de la Federación Baluarte Campesino Manuel Polanco y el tesorero de la misma Dubier Suárez dónde se firmaron actas de algunos compromisos para mejorar la operatividad del contrato pero con el pasar de los días eso quedó en letra muerta.

Las gráficas hablan por sí solas no solamente el estado de algunos alimentos sino también el documento hecho llegar a los entes de control por parte de quienes aseguran el contrato con la Confederación Baluarte Campesino está podrido de corrupción (ver facsímil).

.

Se el primero en dejar un comentario

Déjanos tu opinión

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


*