La vicepresidenta Francia Márquez negó de manera categórica los supuestos vínculos que la relacionan con las disidencias de las FARC lideradas por alias “Calarcá”.
A través de un comunicado oficial, Márquez calificó las versiones como “infamias” sin ninguna prueba verificable, asegurando que nunca ha sostenido contacto alguno con miembros de grupos criminales.
La filtración de archivos y mensajes atribuidos a esa estructura ilegal, en los que también se mencionan a otros funcionarios del Estado, ha desatado un debate nacional sobre la veracidad del material y la necesidad de una investigación oficial que esclarezca su origen.
La vicepresidenta pidió que cualquier señalamiento sea sustentado con evidencia sólida, mientras organismos de control y sectores políticos han solicitado peritajes forenses para determinar la autenticidad de los documentos y establecer posibles responsabilidades.
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