El municipio de Agustín Codazzi (Cesar) atraviesa momentos de luto y conmoción tras confirmarse el feminicidio de Natalia Castrillo Benjumea, joven madre de dos hijos, cuyo cuerpo fue hallado en una finca del corregimiento de Llerasca, a orillas de un río y enterrado en una fosa.
Natalia había sido reportada como desaparecida desde la medianoche del sábado. Tras labores de búsqueda, un habitante de la zona condujo a las autoridades hasta el lugar donde se encontraba el cadáver. El hallazgo fue realizado con apoyo de la Fiscalía General de la Nación, el Ejército Nacional y la Policía Nacional, quienes adelantaron los actos urgentes de recuperación y levantamiento.
El caso dio un giro el 24 de diciembre, cuando Geovani Andrés Fuentes Salcedo, de 28 años, se presentó voluntariamente ante las autoridades y confesó ser el autor del crimen. La Fiscalía Quinta Local de Codazzi emitió de inmediato orden de captura por feminicidio, la cual fue materializada el jueves.
La Policía Metropolitana de Valledupar expresó su solidaridad con la familia de la víctima y recordó que, aunque en diciembre se registró una reducción del 65% en casos de violencia intrafamiliar, este hecho evidencia que la lucha contra la violencia de género sigue siendo un desafío urgente en la región.
Natalia deja una niña de 7 años y un niño de 2, quienes enfrentarán estas fiestas sin su madre. La comunidad de Llerasca exige justicia y una condena ejemplar, además de garantías de no repetición frente a hechos similares que han marcado dolorosamente al corregimiento en años anteriores.
Las autoridades mantienen bajo reserva detalles adicionales mientras avanzan en la recolección de pruebas y testimonios para esclarecer plenamente lo ocurrido. La Fiscalía y la Policía reiteraron su compromiso de llevar el caso hasta sus últimas consecuencias y devolver tranquilidad a los habitantes de Agustín Codazzi.
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