Así terminó el viaje sin retorno de Leyder

Loriquero viajó a Afganistán en busca de un mejor futuro… y encontró la muerte

El joven Leyder García Cuadrado murió en circunstancias aún no esclarecidas mientras trabajaba en seguridad en Medio Oriente.

Lo que comenzó como un viaje lleno de esperanza terminó en tragedia. En la vereda El Salto, del corregimiento de Sananterito, el silencio se volvió más pesado desde el sábado 11 de octubre, cuando la familia de Leyder García Cuadrado, un joven loriquero de 27 años, recibió una llamada que les cambió la vida: su hijo había muerto en Afganistán, a miles de kilómetros de casa.

Leyder era un joven trabajador, respetuoso y soñador. Creció entre el río y la tierra cálida del Sinú, donde aprendió el valor del esfuerzo y la disciplina. Sirvió en la Policía Nacional y posteriormente se desempeñó en seguridad privada, siempre con la meta de construir un futuro estable para él y su familia.

Sin embargo, como muchos jóvenes colombianos, se enfrentó a la falta de oportunidades laborales en su tierra. Fue entonces cuando un amigo le habló de una oferta de trabajo en Afganistán: bien remunerada, aunque peligrosa. Movido por la ilusión de ayudar a los suyos y ahorrar para un nuevo comienzo, decidió aceptar. Hace apenas un mes se despidió con un abrazo largo y una promesa: volver pronto.

Esa promesa no se cumplió.

De acuerdo con versiones preliminares, Leyder habría perdido la vida en medio de un enfrentamiento armado, mientras cumplía funciones de seguridad junto a una fuerza local afgana. Su familia, sumida en la tristeza y la incertidumbre, intenta ahora repatriar su cuerpo para darle el último adiós en su tierra natal.

En Lorica, la noticia ha causado conmoción. Vecinos, amigos y conocidos lo recuerdan como un hombre tranquilo, servicial y lleno de sueños. Su historia refleja la dura realidad de muchos jóvenes que, empujados por la necesidad, emigran buscando un mejor futuro sin imaginar que el destino puede jugarles en contra.

“Se fue con la esperanza de mejorar su vida y la de nosotros, pero nunca pensamos que no volvería”, expresó entre lágrimas un familiar cercano.

Hoy, Lorica llora a Leyder García Cuadrado, un hijo del Sinú que partió con sueños y regresará en silencio, envuelto en el dolor de todo un pueblo.

Se el primero en dejar un comentario

Déjanos tu opinión

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


*