Un fuerte operativo de emergencia se activó en el sector del Chorro de Quevedo, en el centro de Bogotá, luego de que transeúntes alertaran a las autoridades por el llanto persistente de un bebé de 11 meses que había sido dejado solo dentro de un vehículo. Al llegar al lugar, uniformados confirmaron que el menor estaba completamente abandonado y en evidente riesgo, por lo que se solicitó apoyo del Cuerpo Oficial de Bomberos.
De acuerdo con el teniente coronel Norberto Caro, jefe seccional de Protección y Servicios Especiales de la Policía Metropolitana de Bogotá, “se encontraba abandonado al interior de un vehículo, generando esto un riesgo a la vida e integridad de dicho infante… se coordina con los bomberos de Bogotá para que acudan al lugar y procedan a abrir el vehículo”. Para salvaguardar al pequeño, los bomberos rompieron uno de los vidrios y lograron ponerlo a salvo.
Minutos después del rescate, aparecieron los padres del menor, quienes afirmaron que habían dejado al bebé en el carro mientras compraban cervezas. Sin embargo, la Policía reportó que ambos “evidenciaban signos de aparente embriaguez”, lo que agravó aún más la situación y llevó a las autoridades a proceder de inmediato.
El bebé fue trasladado a un centro especializado de protección, donde personal idóneo asumió el restablecimiento de sus derechos. La Policía Metropolitana de Bogotá reiteró su llamado a denunciar cualquier hecho que ponga en riesgo la vida de un menor a través de las líneas 123 y 141.
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