La historia de José Antonio Sánchez Pabón, un joven oriundo de Fundación, ha conmovido a toda una comunidad tras conocerse su fallecimiento en Ucrania, país al que viajó en busca de mejores oportunidades económicas y un propósito en medio de un conflicto ajeno.
Movido por la promesa de un salario que podía alcanzar hasta los 20 millones de pesos, José decidió dejar atrás a su familia y su tierra para enrolarse en el Ejército ucraniano. Su decisión, marcada por la esperanza de una vida distinta, terminó en tragedia. En los últimos días, la noticia de su muerte llegó a Colombia, dejando a sus seres queridos sumidos en el dolor y la incredulidad.
Desde Fundación, familiares y amigos lo recuerdan como un hombre valiente, soñador y decidido, que apostó por un futuro diferente, aunque el destino le jugó en contra. Entre lágrimas, sus allegados hacen un llamado a los jóvenes del país para que reflexionen antes de tomar decisiones tan arriesgadas y valoren las oportunidades que pueden surgir en su propio entorno.
El caso de José Antonio pone sobre la mesa una realidad silenciosa: la migración de jóvenes colombianos hacia escenarios de conflicto internacional, impulsados por la necesidad económica y la falta de oportunidades locales. Su historia se convierte en un símbolo de los riesgos que enfrentan quienes buscan cambiar su destino a cualquier costo.
Hoy, Fundación lo despide con dolor, pero también con una profunda reflexión sobre el valor de la vida, el arraigo y la urgencia de construir caminos de esperanza desde casa.
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