
Techos deteriorados y filtraciones ponen en riesgo a estudiantes y maestros; comunidad denuncia inacción y reclama la salida del rector.
La comunidad educativa de El Cerrito, en la zona rural de Montería, encendió las alarmas por el grave deterioro de la escuela del corregimiento, donde los techos, a punto de desplomarse, y las filtraciones constantes durante las lluvias amenazan la seguridad de estudiantes y docentes.
Padres y profesores aseguran que el agua invade las aulas en cada aguacero, interrumpiendo las clases y exponiendo a los menores a enfermedades. Además, acusan al rector de no tomar medidas para enfrentar la crisis, llegando a pedir su renuncia.
Mientras tanto, la Alcaldía de Montería, en cabeza de Hugo Kerguelén, adelanta un plan de mejoramiento de infraestructura educativa por 46.000 millones de pesos, con intervenciones en aulas, baterías sanitarias, redes eléctricas y comedores escolares. El proyecto también contempla la construcción de una nueva sede para El Cerrito, con enfoque sostenible y áreas agroproductivas, aunque la comunidad denuncia que los problemas actuales requieren atención inmediata y no pueden esperar.
La exigencia es clara: reparaciones urgentes para frenar el riesgo de colapso y acelerar la nueva construcción que prometen transformar la educación en este sector rural de Monteria
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