Miguel Ayala, hijo del cantante Geovanny Ayala, rompió el silencio tras haber sido rescatado luego de varios días de incertidumbre. Con evidente conmoción, describió los instantes más críticos que vivió junto a su mánager mientras esperaban ser encontrados, un periodo marcado por el miedo extremo y la sensación de estar al borde de la muerte.
El joven recordó que la angustia se apoderó de ellos desde el primer momento. “Los primeros días fueron horribles, en serio, no podíamos dormir, con miedo a que nos asesinaran”, dijo, subrayando el terror constante al que estuvieron expuestos y la incertidumbre sobre si lograrían sobrevivir. A ello se sumaron el agotamiento y la escasez de alimentos, que intensificaron la desesperación durante las jornadas más difíciles.
Pese a ese panorama desolador, Ayala aseguró que la resistencia mental fue clave para no rendirse. “Supongo que no nos iba a pasar nada peor que lo que nos pasó a nosotros”, expresó, al recordar cómo el humo presente en el ambiente complicaba aún más su permanencia en el lugar y afectaba su estado físico.
En medio del trauma, Miguel destacó la fe como su principal sostén. “Gracias a Dios por ayudarnos, con el hambre, con el humo, muchísimas gracias a Dios”, afirmó. Su testimonio se suma a la información que las autoridades están recopilando para esclarecer las circunstancias de la emergencia y avanzar en el proceso de atención integral a los rescatados.
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