
En un momento marcado por la agudización de los debates políticos y la proliferación de versiones sin sustento, el representante a la Cámara Wadith Manzur rompió el silencio para aclarar su posición dentro del Partido Conservador Colombiano. A través de declaraciones firmes y un llamado a la sensatez, Manzur negó categóricamente cualquier distanciamiento con su colectividad, respondiendo a lo que calificó como una estrategia de desprestigio promovida por actores sin propuestas concretas.
“No hay quiebre, ni fisura. Sigo firme, comprometido y convencido de que este proyecto político tiene mucho por aportar al país”, manifestó el congresista, señalando que la desinformación solo fortalece su convicción de que su trabajo está generando impacto.
El partido respaldó oficialmente su militancia, recordando que Manzur conserva todos los derechos que le otorgan los estatutos para futuras aspiraciones. Además, subrayaron que no existe ninguna solicitud de retiro ni se ha considerado negarle avales.

En sus declaraciones, Manzur evitó confrontaciones personales, reafirmando que su trayectoria política ha estado guiada por la argumentación y el respeto. “No necesito atacar para construir. Mi gestión habla por sí sola”, afirmó.
Analistas consideran que esta situación refleja el clima de tensión que permea algunos sectores políticos, donde el ruido mediático y las campañas de desprestigio ganan terreno frente al debate de ideas. La defensa pública de Manzur es vista como una estrategia para blindar su imagen y reafirmar su liderazgo ante sus simpatizantes.
Finalmente, el representante envió un mensaje a sus seguidores: “Nuestro proyecto político seguirá creciendo sin recurrir a las malas prácticas. Caminamos con ideas, no con insultos. Y eso, tarde o temprano, marca la diferencia.”
Se el primero en dejar un comentario