Durante un evento en Tierralta, Córdoba, el presidente Gustavo Petro anunció que su gobierno inició conversaciones con el Clan del Golfo —autodenominado Ejército Gaitanista de Colombia— fuera del territorio nacional. El anuncio se dio en el marco de la entrega de 6.500 hectáreas de tierra a campesinos, como parte de la reforma agraria.
Petro explicó que estos diálogos están condicionados por un marco sociojurídico, en el que:
Lo social implica alternativas económicas para las comunidades afectadas
Lo jurídico depende del proyecto de ley presentado al Congreso, que busca aplicar justicia restaurativa incluso a delitos graves
El mandatario insistió en que su gobierno ha decomisado más cocaína que cualquier administración anterior y que su prioridad es “desmantelar pacíficamente el narcotráfico para que haya paz”. También señaló que la verdad sobre el conflicto armado sigue “enmochilada”, y que es necesario culminar el proceso iniciado con la desmovilización paramilitar.
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