La Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios reveló serias irregularidades en la operación de Aqualia Latinoamericana, empresa encargada del servicio de acueducto en Cereté, Sahagún y Ciénaga de Oro, San Carlos . Los hallazgos surgieron tras una auditoría compleja realizada en respuesta a las constantes denuncias de la ciudadanía y alcaldes como, Said Bitar, Alejandro Mejía y Jairo balmaceda, quienes han cuestionado públicamente el deterioro del servicio y las quejas de los usuarios.
Según el informe de vigilancia especial, Aqualia presenta fallas estructurales y operativas que podrían derivar en sanciones graves, incluso en una eventual intervención. Entre los principales hallazgos se destacan:
• Estructura organizacional incompleta.
• Omisión de información del personal: la empresa no entregó el listado detallado de trabajadores vinculados a la operación ni sus áreas.
• Imposibilidad de verificar competencias laborales por falta de documentación.
• Limitaciones en la vigilancia financiera: reportes no aprobados, inconsistencias y errores en documentos contables.
• Omisión en cartera, depreciación de inversiones y pasivos estimados sin soporte claro.
• Problemas en la calidad del agua, que no sería apta para el consumo humano.
• Elevada pérdida de agua por falta de mantenimiento.
• Deficiencias en el tratamiento de lodos y en el mantenimiento de tanques y albercas.
La Superservicios también cuestionó el cobro de tarifas no reguladas y denunció que Aqualia estaría facturando un consumo básico incluso en viviendas sin medidor, práctica que va en contra de la normatividad vigente. La empresa tiene la obligación de instalar los medidores y garantizar un cobro justo.
Aqualia recibió un plazo para responder y presentar correctivos, pero hasta la fecha no ha entregado la información requerida. La entidad advirtió que la falta de respuesta podría agravar el proceso sancionatorio. Cabe recordar que durante la visita de la Superintendencia a Córdoba donde opera Aqualia fue la empresa con mayor número de quejas ciudadanas, especialmente en Cerete con los proyectos Z4 y Z5. La situación genera preocupación adicional ante la próxima construcción del acueducto que abastecerá a Ciénaga de Oro. La presión de los alcaldes y las denuncias de la comunidad han puesto en evidencia una operación que, según la Superservicios, presenta fallas profundas que afectan directamente a miles de usuarios en Córdoba.
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